Una de las cosas más desagradables que pueden ocurrir durante el sueño es el estar babeando. Pero ¿por qué sucede esto? ¿Y cómo es posible tratar esta enfermedad? Se sabe que el cuerpo produce en promedio un litro de saliva durante el día, sin embargo, no llegamos a babear debido a que los músculos de la boca están tensos y se utilizan todo el tiempo, porque incluso con la boca cerrada, sin hablar o masticar, los músculos están activos manteniendo los labios cerrados..
Sin embargo, cuando dormimos nuestros músculos se relajan y la boca tiende a permanecer abierta, que por cierto, al dormir de forma lateral facilita el acto de goteo. Este acto es involuntario, porque no hay manera de controlar lo que hacemos cuando estamos dormidos.
También hay algunos problemas dentales que pueden ser responsables de este hábito. Hay varios factores relacionados con el sistema oral que pueden dar paso al acto de babeo dificultando el cierre de los labios. La maloclusión, la lengua más grande de lo normal, malformación de los huesos y la desviación del tabique son algunos de estos factores.
Sin embargo, lo contrario también puede suceder, ya que el acto continúo de babear puede provocar sequedad en la boca, mejillas flácidas, labios menores sin fuerza, dejar los labios secos y agrietados, probabilidad de desarrollar la halitosis, ronquidos, deglución atípica, cambios en la voz, entre otros.
Tratamientos
Para resolver este problema, se pueden tomar algunas medidas. Y para ello, entre las medidas más apropiadas se puede mencionar el hacer una restauración de la respiración nasal, tonificar los músculos de los labios, ajustar la posición de la lengua y los labios, así como también corregir la masticación, la deglución y el habla (del cual puede estar experimentando fallos).
¿Qué se puede decir sobre la ingestión de insectos?
Algunas personas que babean pueden encontrar al despertar una mancha marrón en la almohada. Con la boca aún más seca, la proliferación de bacterias aumenta pudiendo causar halitosis, la caries dental o incluso la contaminación de la enfermedad por un insecto digerido accidentalmente. La mancha marrón puede indicar serios problemas gastrointestinales, sangrado, úlceras o ser causado por algún tipo de droga.